S.A. Hospital Central de Maracay
Departamento de Docencia
Metodología de la Investigación
Poliposis
nasal y calidad de vida
Autores:
Dra. Adriana Cordero
Dra. Yelitza Molina
Tutor: Dr. Richard Palma Phd
Maracay,
Julio 2017
·
Dra. Adriana Cordero
Médico Cirujano
UCSA, Residente 2° año ORL HCM
·
Dra. Yelitza Molina
Médico Cirujano
UNERG, Residente 2° año ORL HCM
Resumen
El término
Calidad de Vida Relacionada con la Salud pretende valorar aspectos de la enfermedad
y el tratamiento relacionados con la vida diaria del paciente desde el punto de
vista del mismo.
Los
cuestionarios de calidad de vida se clasifican en específicos y genéricos. Los
cuestionarios genéricos sirven como perfiles de salud y son amplias y fiables y
pueden evaluar la calidad de vida en distintas enfermedades y condiciones,
intervenciones terapéuticas y poblaciones. Por otro lado, los específicos son
encuestas específicas que permiten evaluar solamente las condiciones
particulares de la patología que interese.
En el caso
de la Poliposis Nasal, enfermedad que afecta significativamente la calidad de
vida de los pacientes estos cuestionarios resultan muy útiles
Los
cuestionarios de calidad de vida en pacientes con rinosinusitis crónica y
poliposis nasal han demostrado una disminución significativa de la calidad de
vida con respecto a la población general.
No existen
cuestionarios específicos de calidad de vida para la PN. Se han utilizado en la
PN cuestionarios genéricos, que son útiles como perfiles de salud y tienen la
ventaja de poder comparar sus resultados con diferentes enfermedades crónicas.
Introducción
Calidad de vida es un término
que engloba el bienestar general de una persona. Ésta se determinan por la
percepción del paciente, respecto a la enfermedad y su tratamiento. Por lo
tanto, la calidad de vida relacionada con la poliposis nasal y los
padecimientos crónicos influye en el bienestar de dicho paciente, más allá de
los síntomas físicos. Es importante conocer el estado emocional, social y
ocupacional para dar un tratamiento eficaz.
La poliposis
nasal, es una enfermedad inflamatoria crónica de la mucosa nasosinusal que
conduce a la protrusión de masas hiperplásicas edematosas en la cavidad nasal a
través del complejo osteomeatal. Con síntomas predominantes nasales que no son
graves ni mortales, pero que provocan una importante y perceptible disminución
en la calidad de vida de los pacientes que las sufren, limitando las
actividades diarias que pueden producir frustración e irritabilidad y causar
pérdidas económicas y laborales importantes.
Analizar la relación de la calidad de vida con esta patología para mostrar el grado de influencia de la
enfermedad, sobre la calidad de vida global del paciente, separando el resto de
factores no médicos que intervienen en ella.
Pretende evaluar aspectos de la enfermedad que no son
estrictamente clínicos, sino relacionados con la vida diaria del paciente y en
qué modo se ve afectada por la presencia de la patología, desde el punto de
vista del propio paciente, por lo tanto representa el efecto funcional de una
enfermedad y de su tratamiento consecuente en quien lo padece, tal y como es
percibido por él.
Por lo tanto, la importancia
de la poliposis nasal como entidad patológica es un hecho reciente, desarrollado
en las últimas décadas, La incidencia de la patología en el servicio de Otorrinolaringología
del Hospital Central de Maracay se desconoce, así como las comorbilidades y por
supuesto la repercusión sobre la calidad de vida en todos los pacientes; razón
ésta que motivó la investigación.
Desarrollo
La poliposis nasosinusal es
una enfermedad inflamatoria en la que tiene lugar una degeneración edematosa
multifocal y bilateral de la mucosa de las masas laterales del etmoides1.
Esta degeneración provoca la formación de lesiones polipoides lisas,
gelatinosas, translúcidas y piriformes, que progresivamente van ocupando los
meatos etmoidales hacia las fosas nasales. Desde este punto de vista, sería más
preciso emplear la denominación de poliposis etmoidonasal. Tiene carácter
benigno y nunca degenera. Es eminentemente crónica tanto en sus manifestaciones
como en su tratamiento, siendo casi siempre médico aunque veces hay que
recurrir al tratamiento quirúrgico. Desde un punto de vista clínico, el
documento EPOS2 (European Position Paper on Rhinosinusitis and Nasal
Polyps) define la rinosinusitis (y en ese concepto incluye a la poliposis
nasal) como una inflamación nasal y de los senos paranasales caracterizada por
dos o más de los siguientes síntomas:
- Obstrucción /
congestión nasal ƒ
- Secreción anterior
o posterior ƒ
- Dolor / presión facial
o ƒ déficit / pérdida del
sentido del olfato.
Las consultas relacionadas con
sinupatía crónica se encuentran entre los primeros lugares de la consulta de
Otorrinolaringologia, y su evolución a poliposis nasosinusal, aunque en menor
proporción, se encuentra en los principales motivos de consulta por su
afectación en la calidad de vida de los pacientes. Otras publicaciones
relevantes citan una prevalencia de la poliposis nasal del 4,3% en la población
general. En lo que respecta al especialista, el 5% de las consultas
otorrinolaringológicas y el 4% de las del alergólogo están en relación con los
pólipos nasales3. La distribución por sexos es de 2 a 3 hombres por
cada mujer. La poliposis suele dar clínica en la cuarta década de la vida y de
forma excepcional puede aparecer en menores de 10 años, debiéndose pensar en
una fibrosis quística, ya que ésta es la causa más frecuente de poliposis nasal
en niños4. En los pacientes con asma diagnosticada, la prevalencia
de poliposis nasal es mayor que en aquellos pacientes no asmáticos. En los
primeros hay que destacar, que la incidencia de la poliposis con respecto al
género, se iguala, e incluso se invierte, siendo más frecuente en mujeres. Las
manifestaciones clínicas de la poliposis nasal y de la rinitis alérgica pueden
ser parecidas aunque la asociación de poliposis nasal y atopia es rara. Entre
el 0,5 y el 1,5 % de pacientes con rinitis alérgica presentan pólipos nasales.
En los pacientes con rinitis no alérgica el porcentaje se eleva al 5%5.
Existen
múltiples patologías que asocian pólipos nasales, entre las que podemos
encontrar: asma, fibrosis quística, el síndrome de Kartagener, el síndrome de
Young, inmunodeficiencias, sinusitis fúngica, etc. Sin embargo, la mayoría de
los pacientes que presentan pólipos nasales están afectados de una enfermedad
inflamatoria de la mucosa sinusal cuya etiología aún hoy no está clara6.
Hay una
importante similitud entre los síntomas de la poliposis y los de la rinitis
perenne o persistente. En los comienzos de la enfermedad suele aparecer
sensación de ocupación nasal sin llegar a obstruir completamente la fosa. Ya en
fases más avanzadas, van apareciendo otros síntomas como la obstrucción nasal
clara y un agravamiento de la hiposmia7. La alteración del olfato puede
ser el primer síntoma; éste es un síntoma progresivo que suele evolucionar a
anosmia. A veces, la pérdida del olfato puede interpretarse como sensación de
pérdida del sabor, que no es más que la manifestación de la ausencia de
retroolfato8. Este síntoma no siempre está presente o aparece de
forma más tardía. La insuficiencia respiratoria nasal suele ser el síntoma prínceps
referido por la mayoría de los pacientes. Inicialmente es cambiante en el
tiempo, dependiendo del tamaño de los pólipos. A veces los pacientes relatan
una variabilidad exagerada de la insuficiencia respiratoria nasal. Este síntoma
es el reflejo de la hiperreactividad nasal propia del proceso inflamatorio,
base fisiopatológica de la poliposis nasal. La cefalea y la molestia ocular son
menos frecuentes. Los dolores faciales se proyectan sobre la zona nasal o
sinusal y se suelen describir como una sensación de pesadez. Se localizan
principalmente a nivel de las regiones maxilar o mediofacial. La epistaxis es
un signo de escasa incidencia. Para la mayoría de los autores no es un síntoma
inicial relacionado con la enfermedad9.
Por
sus asociaciones y sus mecanismos fisiopatológicos, la PNS es una afección que
puede presentarse aislada o formando parte de un síndrome. Así, se han descrito
varios tipos de PNS: ƒ Tipo
I: poliposis aislada. ƒ Tipo
II: poliposis asociada a asma. Tipo III o tríada de Widal: asociada a asma y a
intolerancia a la aspirina. Tipo IV o inclasificable: síndrome de Woakes, de
Young, discinesia ciliar o mucoviscidosis. Los tipos I, II, y III representan
respectivamente el 50, el 30 y el 20% de los casos de PNS1.
Los
objetivos del tratamiento de la poliposis nasal van destinados a eliminar la
inflamación sinusal y los pólipos nasales, a restablecer la respiración nasal,
restaurar el sentido del olfato y prevenir las recurrencias de los pólipos
nasales. El tratamiento médico con corticoides intranasales o sistémicos es la
primera línea terapéutica de la poliposis nasal, aconsejándose la cirugía
endoscópica en el caso de fracaso del tratamiento médico5.
El impacto de esta enfermedad en la vida diaria también fue estudiado, a
través del análisis de los potenciales desórdenes del sueño (cuestionario
validado) y calidad de vida (QOL, cuestionario SF-36) en pacientes con PN,
comparados con controles sin PN.
Un cuarto de los pacientes con PN (24.6%) reportaron una sensación de
malestar debido a su enfermedad nasal, durante el día como en la noche en la
mayoría de los casos (61.2%)10.
Comparado con los controles, los pacientes PN tuvieron un riesgo dos
veces superior de sufrir alteraciones del sueño, el ronquido fue reportado por
el 50.5% de los pacientes con PN vs. 35.7% de los controles.
Todos los puntajes del cuestionario SF-36 demostraron un significativo
impacto negativo de los PN sobre los diferentes aspectos de la QOL.
El corriente estudio subraya el impacto negativo de la PN sobre la QOL y
el sueño, dos alteraciones que rara vez son consideradas en esta patología.
En suma al malestar y baja QOL experimentada por estos pacientes, se ha
detectado un significativo aumento en las alteraciones del sueño, sugiriendo un
riesgo de sufrir futuras complicaciones y enfermedades crónicas10.
Conclusiones
La poliposis nasal es una
enfermedad inflamatoria crónica de la mucosa nasal. Como gran parte de las
enfermedades crónicas nasales produce obstrucción nasal, rinorrea, alteraciones
del olfato y cefaleas. Estos síntomas suelen causar a los enfermos problemas de
sueño, irritabilidad, problemas de relación socio-laboral y familiar que pueden
llegar a afectar en gran medida a su calidad de vida. Para ello existen cuestionarios validados que
nos permiten evaluar de manera objetiva estos aspectos no cuantitativos dentro
de la perspectiva del paciente y de su sintomatología. Al ser la poliposis una
enfermedad crónica es evidente su afectación considerable en la calidad de vida
de los pacientes y si bien muchas veces pasamos por alto esto ya que no resulta
incapacitante, ciertamente influye negativamente en el desarrollo de las
actividades diarias y vida cotidiana de los mismos; es por ello que un adecuado
manejo y tratamiento conllevarán a unja mejora en la vida de aquellos quienes
la padecen.
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